En la búsqueda de películas que
me sorprendan, me he encontrado con muchos fiascos y por supuesto con muchas
cintas que se han convertido en mis favoritas, pero normalmente cundo busco una
película con un mensaje profundo o por lo menos que cause sensaciones en mi,
debo confesarlo el cine hecho en México es mi última opción.
Y no, no es por malinchista
o por sentirme pseudointelectual viendo películas europeas, pero la verdad es
que el cine mexicano no tiene como su principal característica hacer el tipo de
cine al cual me refiero, salvo algunas excepciones que confirman la regla.
Es por esto que el día de
hoy recomendaré una cinta de manufactura mexicana que todo el mundo debe ver,
me refiero a “Después de lucia”, una película mexicana del género drama
dirigida por Michel Franco.
Y en ella se muestra la
relación entre Roberto y su hija Alejandra, de 17 años. La cinta comienza con
los protagonistas cambiando su lugar de residencia, mudándose de Puerto
Vallarta a la ciudad de México, todo es como resultado de un choque en el que “Lucia”
la esposa de Roberto perdió la vida.
Roberto se muestra deprimido
y busca este nuevo comienzo en otra ciudad alejado de sus recuerdos, Alejandra
por su parte se muestra tranquila y preocupada solo por su padre, al cual
quiere ayudar.
Esta aparente funcionalidad
de la relación de ambos se ve interrumpida por un evento en la vida de
Alejandra y sus nuevos compañeros de escuela, lo cual provoca que ella se
convierta en el blanco de todos para ser víctima de bullying y de hostigamiento.
Pero Alejandra decide es guardarse sus problemas para no alterar la frágil
situación de su padre.
Una cinta fuerte, intensa y que no pretende construirse a
partir de los clichés, con actuaciones, un guión y una dirección impecables,
esta película sin duda los dejara impactados.
Con una película tan buena, ahora solo me pregunto:
¿Qué sigue después de esta cinta?
¿Qué sigue después de esta cinta?